Blanco que te quiero blanco

antoniamagazine-yodona-blanco-entrada

antoniamagazine-yodona-blanco-zapatoEl blanco es mi color favorito, porque el blanco es sinónimo de verano, porque resalta mi moreno, porque combina con todo, porque es el color de la ropa limpia, porque es sinónimo de boda y aqui la Doña es mucho de boda y casamiento, que me gusta una fiesta gratis… Aunque yo he invitado dos veces a este tipo de fiesta. Mi primera boda fue más bien una rave party, mucha juerga, mucha musica, mucho alcohol y seguro que para algunos más cosas. Mi segunda boda fue un jolgorio, ¡lo pasé tan bien!. Muchos amigos de los buenos -aunque con un par ya no me hablo, la vida…-, mucha gente con hambre y ganas de fiesta, y sobre todo mi marido y yo, que disfrutamos como si la cuenta la pagase otro.

Sin embargo no me gustan los coches blancos, me parecen taxis. Los zapatos en este color tampoco son mis favoritos, la clara del huevo a pesar de ser blanca, no me gusta demasiado, y las nubes no me gustan ni blancas ni grises.

Pero si hay algo que me da entre pánico y terror son dos cosas: un folio en blanco, o en su defecto la pagina de word de la Antonia, y Víctor Blanco. Lo primero por obvio, que cada vez que me tengo que poner a escribir la parte que me corresponde de esta gran magazine, me entra un miedo que deja mi mente del color que nos ocupa. Ya puedo tener la ídea muy clara y organizada en la cabeza o en una nota del outlook, que cuando tengo que plasmarla aqui me quedo paralizada. La idea que me parecía maravillosa pasa a ser un horror, lo que sonaba bien en mi mente e incluso cuando lo voy escribiendo, pasa a ser terrorífico cuando lo releo. Y es raro el mes que no me pasa algo del tipo que el portatil se quede sin bateria, que el wifi falle o que le de a «cancelar» en lugar de «guardar». A veces para evitarlo me guardo una copia en mi mac, pero tampoco siempre me acuerdo de hacerlo… En fin.

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Y lo segundo, es decir, Victor Blanco – no os pongo link porque no quiero cargar con esa culpa- , me da miedo por si mismo. Porque es un personaje que dice ser estilista, aunque sus estilismos salgan en los «arg» de la Cuore u otra revista de culto, porque no acepta una crítica de nadie, ¡ni siquiera de mi!, porque tiene un ego que no cabe ni en las bolsas más grandes del Mercadona, porque no se quién se cree, pero yo si sé quien creo que es y no me parece una persona para nada apetecible. Aunque debo reconocer que me divierte, por valiente, por imprudente y porque es un poco «enfadica» y la gente «enfadica», da risa… no me digais. Además es un poco EB, y ya sabeis que a mi los y las EB’s me fascinan entre un mucho y un muchísimo.

Si tuviese que elegir un mes para identificarlo con este color, sin duda elegiría el mes de abril, porque es además del preámbulo del verano, el mes del libro. Y aquí se juntan todas mis fobias y filias, os explico:

En Abril aunque es un mes lluvioso, es un mes sobre todo muy primaveral, con sus nubes… altas y bajas, blancas y grises…, pero  con sus ratos de buen sol por lo que en este mes empiezo a «trabajar» mi bronceado. Abril es el mes en que si te van a invitar a alguna boda, te dan las primeras invitaciones, y en Abril, las zapaterías se llenan de zapatos blancos, porque se acercan también las comuniones y no hay verano que alguien no lleve un zapato inmaculado. ¿Y quiénes viven de enfrentarse a cientos de paginas en blanco? Los escritores, que este mes es su Agosto. Y ¿quién creeis que ha sido tan valiente como para publicar un libro con consejos sobre cómo vestir? Sí queridos, sí… Víctor Blanco, que gustosa os haría una crítica del libro, pero me temo que no he podido leermelo entero, porque es una tragicomedia no apta para todos los públicos y yo quiero seguir conservando mi blanca inocencia. Aunque si vosotros me pedís un analisis detallado, a lo mejor hasta me lo pienso!. ¿Firmará en alguna feria?, ¿escribirá un segundo libro?, si de «Rec» esa película que quiere ser el «Saw» español han hecho ya una tercera parte, que no os extrañe que este personaje publique una nueva entrega, que no sé si será secuela del anterior, pero seguro que a nosotros nos deja secuelas irreparables. Yo por si acaso, seguiré leyendo esta revista que está llena de talento con mucha modestia.

Yo Doña, hoy… precavida.