Aquí nos tenéis «con la cara lavada y recién peinás». Hemos descansado (no mucho), nos hemos oxigenado y le hemos cambiado el look a ANTONIA.
Sospechábamos que ANTONIA era necesaria, pero no que la necesitárais tanto. El lifting no venía porque estuviera vieja o fea, sino porque las cosas bonitas no siempre son prácticas, y gran parte del estrés y el agobio a la hora de cerrar cada mes venía de ahí, de suplir las carencias de la maqueta con imaginación y gusto.
Pero necesitábamos volver. Os hemos echado mucho de menos. Algunos emails nos han hecho saltar las lágrimas. No sabíamos que teníamos tanto tirón, en serio.
Pensamos que gran parte del éxito entre las/los usuarias/os viene de que tenemos «la manga muy ancha». Publicamos prácticamente todo lo que nos llega, ya sea de los propios usuarios (con ideas o incluso artículos enteros), de diseñadores, de fotógrafos… Lo que no quiere decir que no tengamos criterio, no os confundáis.
¿Por qué lo hacemos? Porque otras publicaciones no lo publicarían nunca, por eso.
Porque todo el mundo tiene derecho a la difusión de su trabajo.
Porque ya está bien de supuestos directores de moda de revistas modernas que rechazan editoriales alegando que «ya tienen cerrada la primavera», cuando le estás enseñando colecciones del otoño/invierno próximo (no, no diré quién), de directores de cásting que le dicen a una niña que con 1’60 no pueden ser modelo (¿perdón, la Pataky, que se harta de hacer publicidad?), de que la gente entienda por cultura ir al Reina Sofía un sábado por la tarde (que es gratis), pero desconozca cuántos espacios y galerías hay en su ciudad.
Porque todavía no hemos leído un sólo artículo en una revista femenina que hable, de verdad, de lo perjudiciales que son las dichosas dietas hiperprotéicas e hipocalóricas. Si fueran realmente eficaces, estaríamos todas como la Werwoby, y esos magos de la dietética en el paro.
Porque no hay cojones de decir que una tendencia en moda es un horror, y que a ver quién es la valiente que se la pone…
En fin, que en estos meses (en los que hemos parado lo justo), leímos lo mismo de siempre en todas las revistas, ratificamos que no tienen casi nada que ver con lo que nos interesa, y hemos pensado que ya era hora de volver a tocar un poquito las narices al mainstream.
Esto que tenéis ante vuestros ojos es un anticipo de cómo va a ser a partir de ahora.
ANTONIA regresa no sólo con un nuevo aspecto, sino con un orden nuevo. Para empezar, accederéis directamente a la página, sin pasar previamente por la portada del mes (seguiremos teniendo nuestra portada y nuestra «antonia» en ella, no os asustéis, pero dentro de la publicación).
Habrá más secciones, y les hemos dado «sección fija» a nuestros colaboradores habituales (Inés González -cine-, Iván Casquete -series de televisión-, colectivo Unga Unga -música-, LaTreceCatorce -sociedad…). Si alguien quiere dar su opinión o colaborar con nosotros, bienvenido es. Mándanos un email a info@antoniamag.com y cuéntanos lo que quieras.
Podréis buscar información dentro de la web con mucha más comodidad, porque dentro de cada sección hemos incluído un montón de categorías diferentes.
Como no siempre nos da tiempo a ir a ver un estreno, leer un libro, acudir a una exposición o comer en un restaurante, os dejaremos muy clarito dónde hemos estado y dónde no, con un sello en la entrada del artículo (LO VIMOS/LO LEÍMOS/AQUÍ COMIMOS). No esperéis encontrar el sellito en los artículos de números pasados (¡¿tenéis una idea de cuántos son?! muchos…), así que será a partir de ahora.
El blog, para vuestros comentarios, sigue activo. Podéis decirnos lo que queráis. Los señores rusos del spam han seguido muy activos estos meses. Ellos sí que nos han echado de menos, que no han parado de intentar dejar comentarios en cirílico, monísimos…
Vuestra rendida admiradora.
Mabi Barbas, la jefa.
pd (¿de los males? bueno, ahí andamos. La edad es lo que tiene)