Amaya Ascunce, periodista, redactora Jefe de Elle.es, creadora del blog «Cómo no ser una drama mamá», y autora de dos libros nacidos de ese blog.
¿Empezaste el blog como recordatorio, como terapia recomendada por tu terapeuta, o porque todo el mundo tenía un blog?
No todo el mundo tenía un blog cuando empecé… Yo diría que como terapia, para mí, porque lo que más me gusta es escribir, y en mi trabajo lo hago muy poco. Empecé un poco por eso, como ejercicio creativo, y también como terapia, porque mi madre realmente es súper pesada…
Yo creo que eso va con el cargo ¿no?
Puede ser, pero te digo que la mía lo es especialmente.
Desde que iniciaste el blog hasta que se editó el primer libro ¿pasó mucho tiempo…?
No. Desde que se me ocurrió la idea del blog pensé «este es uno de esos libros, súper tontorrones, que se venden en el VIPS al lado de las tazas, se convierte en un best-seller y yo me forro». Esto es lo que pensé… pero me dije, a ver… yo no tengo tiempo para escribir un libro, porque es más o menos un año de trabajo. Como me dedicaba a internet, pensé que un blog tiene un público, que te obliga a escribir casi a diario, y puedes ver si algo funciona o no.
Había visto algún caso en Estados Unidos y en Inglaterra que habían conseguido publicar, y me dije, oye, voy a probar. Empecé así, un poco tontamente.
Cuando vi que tenía público, lo empaqueté, lo mandé a Planeta y me lo aceptaron.
¿Te dijeron que sí a la primera?
A la primera
Claro, porque es el típico libro tontorrón que se vende en la estantería del VIPS y se convierte en un best-seller… JAJAJAJAJAJA
SÍIII, JAJAJA. Justo lo que pensé, lo definí bien, y salió. Nos fastidió la crisis económica, porque hemos vendido un poquito menos de lo que esperábamos, pero muy bien. No me puedo quejar.
¿No se te cae la cara de vergüenza por haber mantenido tu identidad oculta, sabiendo como sabías que muchos compañeros conocíamos y seguíamos el blog?
Vergüenza no, en realidad me daba mucho miedo que mi jefa en aquel momento se enterara, porque trabajamos en un sitio donde hay un montón de blogs, y podía haber tenido el blog en cualquiera de nuestros medios, pero quería ser libre, hacer el tonto y no jugarme las lentejas.
Me asusté mucho sobre todo porque mi madre no lo sabía. Cuando mi entorno empezó a hablar de mi blog sin saber que era mío, fue cuando me acojoné… y confesé, porque El País habló del blog, y en ese momento se disparó todo, y no tuve más remedio que confesar
Ahí fue cuando decidiste salir del armario bloguero…
Senté a mis padres. Les dijé «papá, mamá, tengo que contaros algo… tengo un blog». Y mis padres se quedaron… asustados, pensaban que les iba a soltar otra cosa, que estaba embarazada o algo así, JAJAJAJAJA. Pero bueno, se lo tomaron bien.
[Foto: Patricia Gallego]
Tras Como no ser una drama mamá llegó En la cocina con la drama mamá. ¿Podemos esperar un La drama mamá ahora es abuela?
Calla, coño, no voy a tener un bebé para escribir un libro… JAJAJAJA… me parece un mal motivo. No, no sé, si alguna vez me quedo embarazada, lo haré; de momento creo que no.
Estoy un poco cansada de la Drama Mamá, de mi madre, y de todo el tinglado que se ha montado alrededor. Así que creo que voy a intentar escribir de otra cosa.
Aunque en el blog siga, porque es una cosa corta, que me puede entretener y eso. Además, lo bueno de crear un bestseller así, es que todos los años hay nuevas embarazadas, así que esto no se acaba nunca… JAJAJAJA
En la red, o tienes trolls o no eres nadie. ¿Tú tienes trolls? ¿de qué se quejan?
Trolls realmente creo que no he tenido. Hubo un psicoanalista que estaba muy preocupado porque decía que de esta manera no iba a superar todos los problemas que mostraba en el blog…
… toma mi número y concertamos una cita en mi consulta…
JAJAJA… algo así.
En mi blog tengo los comentarios abiertos, no tengo ningún tipo de moderación, y nunca he tenido ningún tipo de comentario así malo. Alguna vez alguien ha puesto «tu madre es una cafre» y los mismos usuarios le contestan, así que por esa parte no.
Tuve muchísimas críticas, eso sí, cuando mi libro se convirtió en la noticia más leída de ElMundo.es, ahí sí que me dieron pal pelo, a mí a mi madre, a Planeta…
¿Sabes que el lobby de las súper madres van a seguir tu carrera con auténtico interés (más bien stalkearla), y como cometas el más mínimo error de drama madre te van a machacar, no?
No sé si las súper madres, mi súper madre me va a dar por todas partes las primera vez que me vea hacer una de las suyas. Eso si me quedo embarazada, que no lo sé, porque ya estoy súper aterrorizada con esto de tener hijos.
Estoy segura de que me voy a tragar todas mis palabras, lo tengo clarísimo.
Sé que eres seguidora de Antonia. Este número lo vamos a llamar «Triunfadores», pero no en el sentido de hacerte millonario, que es en el que lo siente el 90% de la gente, sino en el de los que se empeñan, como sea, en hacer lo que les gusta, lo que les satisface. ¿Qué opinas? ¿Te sientes una triunfadora?
Sí, yo creo que he tenido mucha suerte, un triunfo total. Sentada en mi casa, haciendo una tontá con idea que tenía sobre mi madre, lo cuento y me lo publican, se vende un montón, me piden un segundo libro, hago lo que me da la gana con el libro, no firmo el contrato hasta que no entrego el libro (que es una cosa que nunca se hace), y me permiten seguir publicando. Encima he conocido a un montón de gente…
Yo creo que ha sido un triunfo total, pero aunque no se hubiera vendido ninguno; todo lo que ha pasado alrededor ha sido fantástico.
Y luego el hecho también de que, en el fondo, me ha servido de verdad como terapia, porque ya no me enfado tanto con mi madre. Me enfado, pero no tanto.
[Foto: Pedro Zozaya]