2º Día de Romería de San Miguel…
En nombre del amor, del amor que mi amigo J siente por su novio, tuve el valor de prepararme para la segunda jornada nada más y nada menos que para llegar al Fòrum a las 4 de la tarde. Y todo para hacerle una foto e intentar que le firmara el disco el señor Nick Garrie!!! Yo quería morir pero cuál fue mi sorpresa al descubrir el Auditori Rockdelux y sentir que era lo que había estado buscando toda mi vida… Sonido genial, aire acondicionado y confortables butacas que te abrazaban impidiendo que te fueras a otra parte. Estuve disfrutando allí de 2 conciertos monísimos, el del ya mencionado señor Nick Garrie y el de la encantadora Laura Marling. Me habría encantado quedarme pero un extraño personaje, sin venir a cuento, se sentó a mi lado y me obligó a abandonar el recinto por culpa de su mala relación con la ducha y con la higiene en general así que, con muy pocas ganas, me adentré de nuevo en el Parc…
Ya os he comentado que el recinto es como una ciudad y que jamás haréis tantos kilómetros por lo que siempre os recomiendo que seleccionéis bien qué vais a ver y en función, sobre todas las cosas, del escenario en el que actúen. Mi selección del viernes fue la siguiente:
Bigott: divertidos como siempre y apuesta segura para empezar la jornada de buen rollo. Lo malo, eran las 18h de la tarde y estaban en el escenario que más lejos quedaba de todo. Aún así, lo dieron todo y fueron bastantes los que hasta allí se acercaron a bailar y corear sus temas.
The Chameleons: Liderados por Mark Burgess, esta banda de post punk demostró por qué ha creado escuela, y por qué su sonido aún es contemporáneo. A pleno sol, tocaron grandes canciones permitiéndose incluso un guiño a Joy Division que el publicó sudó encantado. Terminaron por llenar el Ray-Ban con sus clásicos ‘In Shreds’ o ‘Second Skin’.
Orthodox: si me pasé a ver a esta banda fue porque me equivoqué de escenario, mi intención era ver a Dirty Beaches pero, es lo que tiene estar entre tanta oferta… ¿Qué me encontré?. Me encontré a 3 tíos enfundados en sus capuchas, sus trajes de monje y con un cuchillo entre los dientes… Una flipada para los amantes del metal más oscuro y experimental!. Para mí, un susto!!!
Rufus Wainwright & His Band: ayyyy Rufus, Rufus!!! No sé si fue porque ya lo había visto en otras ocasiones o porque me convence más en solitario que con tanto coro góspel pero el caso es que, tras el tercer tema salí huyendo del escenario San Miguel en busca de algo que me animara el cuerpo y que no me diera ganas de cortarme las venas. Creo que fue el sentir popular pues la gente salía en masa huyendo del concierto… Los hubo también con lágrimas en los ojos de gusto, todo hay que decirlo… Creo que un festival no es el escenario adecuado para el trabajo de este artista que lo mismo se mete en el pellejo de Judy Garland que firma una ópera.
I Break Horses: de camino al escenario “innombrable” aquel que queda por Andorra me llamó la atención que en el escenario ATP había mucha masa y decidí sacrificar Girls por este grupo que si bien, no hace nada novedoso o diferente a muchos otros grupos, los suecos consiguieron engatusarme y hacer que me viera todo el concierto y saliera encantada. Ideales para los amantes del dream pop y el shoegaze. Por no mencionar los guapérrimos que son los tres.
Dirty Three: por recomendación de una amiga amante de todo lo que se hace con un violín me dispuse a disfrutar del concierto de este trío que sinceramente, desde el minuto 1 me dejó sin aliento. Es puro rock desde una perspectiva estrictamente instrumental. Un violín, una guitarra y una batería son su único armamento y podrían dar una lección a más de uno sobre lo que se debe hacer sobre un escenario.
Afrocubismo: era hora de moverse un poco al ritmo del son cubano mezclado con raíces africanas y una exquisita instrumentación que hacen de este grupo un imprescindible en las fiestas y un diálogo cultural digno de ver sobre un escenario.
The Cure: estaba decidida a sacar las mejores fotos pero viendo que 2h antes del concierto ya se habían congregado miles de fans y miles de medios, no me vi con cuerpo de perder tanto tiempo de mi vida esperando de pie aplastada así que decidí pasar. Y menos mal que no me quedé porque, para deleite de sus más aférrimos seguidores, se hicieron más de 3h de concierto que yo sinceramente no hubiese soportado. Repasaron lo más destacado de toda su discografía y fue el concierto del festival para muchos de los asistentes.
The Drums: tuve que elegir entre perder las piernas y correr hacia el escenario “innombrable” para ver a los M83 o quedarme un ratito sentada para ver a esta banda de neoyorquinos. Y juro por Dior que nunca he tomado una decisión mejor. Pensando que iba a ver un concierto tranquilito, mono y sin excesos me encuentro con los pelos de punta escuchando cada uno de los temas del nuevo disco de estos chicos. Han optado por dar un paso al frente en vez de repetir la fórmula y quedarse encallados. Y pese a que no renuncian del todo al pop soleado, apenas un año después de su debut han incorporado pinceladas electrónicas para sonar más oscuros y melancólicos, aunque no por eso menos bailables. Para mí, el concierto y el descubrimiento del año.
The Rapture: como ya estábamos ambientados no queríamos renunciar a las ganas de bailar y nos fuimos directos a botar con el directo de estos chicos de Nueva York. En clave soul, pop, rock, funk y electrónica nos hicieron bailar con hits como “Miss You”, “How Deep Is Your Love?” o “House Of Jealous Lovers” que los han convertido en el referente de las pistas de baile más indies.
Benga: que se quede en su casa porque no pienso volver a soportar tremendo despropósito. No sé si pensaran lo mismo los que estuvieran del revés…
Aeroplane: tras no pocos remixes para Sebastian Tellier, Au Revoir Simone, Robbie Williams y Friendly Fires, este chico se ha consolido como músico y productor convirtiéndose en uno de los valores al alza de la nueva electrónica europea. Nos salvó la vida y gracias a sus maravillosos temas hizo que nos fuésemos con una sonrisa a casa.
Me marché a reponer fuerzas para la última jornada de romería…