Toda la vida España ha tenido que elegir estar de un lado o de otro, desde los Reyes Católicos o antes… y esto ha cambiado de un tiempo a esta parte, os lo voy a demostrar:
ANTES: ¿Eres rojo o facha?
AHORA: Puedes ser rojo, puedes ser facha o… puedes ser un indignado
ANTES: ¿A quién quieres más: a mamá o a papá?
AHORA: A mamá, a papá, a la mujer de papá, a la mujer de mamá, a la abuela, a la profe, la canguro… ufff
ANTES: ¿Qué te gusta más, la Primera o la 2?
AHORA: No os voy a enumerar la cantidad de canales que tenemos gratuitos, porque la Antonia me mata
ANTES: ¿Eres Telefónica o eres Airtel? (Airtel… ¿a que no os acordabais?)
AHORA: Ahora Telefonica se da de hostias para hacer clientes; antes te esperaban sentados y mirando al mar
Antes: ¿Eres de parchís o más de la oca? Esto dejamos de planteárnoslo con los Juegos Reunidos Geyper, que yo creo que fueron los que decidieron que ya está bien de tanto elegir y tan poca elección, cientos de juegos y que los niños se mataran a palos para decidir a qué jugar. Porque mira, tú te pegabas por jugar a las damas, y tu hermano al backgammon (que a día de hoy aún no sabe ni de qué va) y ganaba el más fuerte o el que más alto chillase, y así tu madre te pudiese oír y dijese aquello de «¡como vaya yo ahí!», y vamos… decidías más pronto que tarde porque sabías que los juegos acabarían en el trastero y tú con la marca de una zapatilla de no marca, en el trasero tatuada. ¡Y tan amigos! te ponías de acuerdo en un pispás y jugabas con tu hermano como si fuese el mejor amigo del mundo.
Cuando hay poco para elegir, las divisiones son mas notorias, pero la elección es mas sencilla… Este no me gusta mucho, pero este me gusta aún menos, así que… de lo malo, lo mejor.
Y oye, ahora vivimos con nuestras miles de compañías telefónicas, mil tiendas low cost – antes la low cost era la Mercería de la Señora Sofía, que te vendía el anorak (que palabra más antigua, ¿que no?), las bragas y hasta el vestido de comunion-, trescientas marcas de coches diferentes, ¡¡¡algunas japonesas!!!, bancos de sitios que ni conocemos, la realidad es que casi tenemos más oferta que demanda.
Pero pese a todo hay un tema que todavía no hemos superado… ese tema del que no se puede hablar en las reuniones de amigos, porque levanta ampolla. Eso que nos tiene robados a cada uno su parte de corazón y que es un sentimiento inamovible…
¿Tú organizas una cena en tu casa y puedes hablar de política? Sí, hoy por hoy podemos, estamos todos indignados y son todos unos chorizos.
¿Tú estás de terraceo con la familia y, puedes hablar de fútbol? ¡Sí, podemos! Porque lo que la roja nos ha dado, además de alegrías, es unión.
Pero…tú haz una mariscada, y pon buen vino… del caro, y paga tú… y eres súper encantadora y haces la rosca, y todos te adoran y lo hacen de corazón, pero… ¿se puede hablar de copla? ¡NO!… No queridos, no se puede… Porque hoy, la España unida por la crisis, la España que ve el fútbol junta, la España en la que hablan los orange con los vodafone, la España que reconoce que la 2 no la ve ni el Tato… todavía no ha superado esa gran pregunta que levanta ampollas y provoca grandes discusiones y que a mi, me ha costado amistades…y esa pregunta es…:
«¿Tú…eres de la Pantoja o de la Jurado?»
No quiero en esta, mi primera intervencion en tan gran revista crearme ya enemigos, sólo diré que a mí… a mí… se me enamora el alma…
Por Yo, Doña…