Tardé lo mío en entender que el dinero no es como los peces ni se multiplica ni se reproduce y que no me vendría ningún iluminado a obrar este milagro. Sin mi padre y Víctor al timón me sentía más abandonada que la barca de Remedios Amaya en la Eurovisión. Espain O point, l’Espagne O point así estaba mi cuenta bancaria.
cruela de val
La fiera de mi suegra – Capítulo 3
Así que mi suegra fue una cornuda… sin remedio ni contemplaciones. Dicen que esa tarde noche, un hombre estuvo rondando la casa del nº 63 de la calle del abejorro, medio tapado por los setos, parecía vigilar el interior. La vecina del 67 ya no se molestaba en esconderse tras los vistillos; sacó unas pastas y un termo de café y se puso a esperar los acontecimientos; sabía que algo iba a pasar y que sería muy entretenido además esos últimos días en la tele sólo hablaban de lo de Francia donde unos melenudos tiraban piedras a la policía – un completo despropósito – , el vecino del 65 a punto estuvo de llamar a las fuerzas de la orden pero justo cuando descolgó el teléfono para pedir socorro, la puerta de entrada se abrió e iluminó el portal y pudo ver a mi suegra sacar dos maletas, dejarlas en las escaleras y cerrar la puerta.
La fiera de mi suegra – Capítulo 1
Todas las que tenemos pareja, para bien o para peor, tenemos una suegra y como es de la familia aún sea política pues no la podemos escoger, tenemos que apechugar con sus virtudes y defectos, no hay tutía, mejor hacerse pronto a la idea de que ELLA es la madre que le parió a muestro chico y que eso siempre será su as en la manga. El poder uterino de una madre es infinito.
A modo de moda
Cada septiembre, junto con la vuelta al cole y la dolorosa en forma de VISA, llega el otoño para fastidiarnos un poco más el retorno a la realidad. Esa nueva estación de paso al crudo invierno tiene fama de nostálgica, trae consigo la niebla mañanera, las hojas van pasando por toda la gama del rojo hacia el naranja para terminar cayendo sin remedio.