Sir Ken Robinson, un admirado experto en creatividad y educación, contaba en una charla en las jornadas TED que “las escuelas matan la creatividad”, que todos los niños tienen un talento, algo en lo que son únicos, y la labor de la sociedad, de la enseñanza es descubrirlo e impulsarlo. Pero que tal y como está planteada la educación hoy en día, siguiendo los preceptos de la Revolución Industrial, lo único que estamos consiguiendo son individuos uniformes y, en cierto modo, inútiles, porque estamos matando esa parte que nos puede hacer avanzar como sociedad.
He leído en una entrevista que te hicieron hace poco, en The Cultural, que siempre has dibujado, desde muy pequeño (6 años), y que conseguiste que tu familia apoyara en cierto modo lo que era evidente que era tu oficio: eres artista. Eso es maravilloso.
Están tan denostadas y ninguneadas las enseñanzas artísticas, que descubrir que el talento de nuestro hijo es la danza, la pintura, la actuación, la música, suponen casi una desgracia, una condena a la miseria. En este país (en todos los mal llamados del Primer Mundo) no se entiende que alguien quiera ser músico, se entiende que quiere ser el número uno en las listas de éxito y vender muchos discos.
Estamos TAN EQUIVOCADOS…
Dime, Fepe ¿tú qué quieres ser de mayor?. Formulo la pregunta en modo irónico, por supuesto.
Aún me quedan los sueños de ser astronauta y arqueólogo. Creo que conservo mucho de mi niñez, tengo muchísimos sueños todavía, y muchos sé que no los voy a conseguir. De cualquier modo, me gusta mantenerlos.
Mi desarrollo personal y profesional, aún que con su parte de agobios y equívocos, se ha producido de modo muy natural. Nunca he planeado ser artista, no creo que sea posible planear eso. Es algo que surge y me siento muy afortunado de poder vivir de eso. Más que nada, me gusta que, con mi trabajo, yo llegue a la gente, que les toque de un modo o de otro.
A mi madre le hubiera encantado que fuera médico; a mis primos arquitectos, que yo me hubiera me unido a ellos. Pero, mas allá de tener talento o no, es necesario tener vocación.
Siempre dibujé y pinté, pero no tenía claro cómo hacer de eso una profesión. También me interesaba el Diseño, la Moda, la Gastronomía…
He tenido la suerte de encontrar personas clave que me han dado el incentivo necesario en el momento en que estaba, y quiero creer que eso sea la clave del éxito.
Mis padres son una gran influencia; mucha gente te va a decir lo mismo, pero yo tengo claro que sin mis padres yo no habría llegado a ningún lado. Mis primeras profesoras de diseño, el taller de cerámica y mi primera exposición internacional, me han cambiado la vida a nivel personal, profesional y artístico.
Sobre el futuro, quiero ser mejor. Para mi, soy una obra en construcción; siempre se puede aprender algo nuevo o una manera diferente de hacer las cosas. Quiero aprender más, exponer más y realizar algunos sueños que tengo: hacer mi libro, ilustrar un caja de galletas, una etiqueta de cava (ojalá sea Freixenet) y dibujar una baraja de tarot.
Como he dicho, son muchos sueños, pero por ahora, me dedico a esos cuatro. 😉
Háblame de tu proyecto, Caelvm.com ¿en qué consiste exactamente?
Caelvm es un proyecto colaborativo de creación y difusión de Arte. Con una visión amplia de lo que es Arte y Creatividad, mi compañero y yo, hemos buscado formas de colaborar con amigos y profesionales que nos encantan. Somos una plataforma virtual de Arte, Diseño y Moda, todo producido en edición limitada y hecho por artistas.
Dentro de Caelvm, proponemos temporalmente a 22 artistas la oportunidad de crear obras fuera de su contexto personal, que son aplicadas en objetos sensibles, prendas de moda y algo de decoración. La idea es intervenir artísticamente en el cotidiano de personas de todo el mundo.
La difusión ocurre a través de eventos culturales, cursos de formación y una programación cuidada, con finalidades profesionales claras, enfocada en enriquecer y potenciar los universos personales de los asistentes.
En Caelvm, nosotros hemos descubierto talentos y habilidades que no conocíamos de nosotros y eso es maravilloso.
Estados Unidos; Roma, Bruselas, Budapest, Sevilla y Madrid (Europa); Pará, Minas Gerais, Rio de Janeiro, Sao Paulo (Brasil); Lisboa, Sintra, Oporto (Portugal)… Siendo tan joven, no has perdido el tiempo, precisamente. Todos han sido viajes para seguir formándote en diferentes disciplinas artísticas relacionadas con la pintura, la estampación y hasta el diseño de azulejos. ¿Cómo se aplican estas técnicas al diseño de moda, uno de los workshops que ofrecéis en Caelvm?
Creo que la creatividad es una fuente que abastece de buenas ideas todos los campos del saber. Hoy, el pensamiento está muy especializado y compartimentado, lo que esta genial, pero no concibe que las disciplinas y las personas no son uniformes sino múltiples, con muchas facetas.
La Moda, el Arte, el Diseño, la Historia, la Sociología, la Arqueología, la Ciencia… todas utilizan la imaginación; todas se tocan en algún momento.
Los tejidos inteligentes son la prueba mas reciente de eso. La idea siempre es ofrecer las herramientas y los recursos, proponer reflexiones y dejar que cada individuo las utilice a su modo propio.
Muchos diseñadores de Moda han partido de otras disciplinas, y es ese punto de partida diferente el que les atribuye un hecho diferencial. Estos cambios y propuestas son geniales, principalmente cuando vienen aliadas a un factor esencial: los conocimientos básicos y específicos necesarios para desarrollar cada disciplina de la mejor forma posible.
Me explico, para ser un buen diseñador de moda hay que entender de tejidos, el acabado, los patrones, además de la creatividad. Conocer bien esos conceptos ayuda que la prenda final tenga calidad, sea bonita e interesante.
Nuestros proyectos de formación se basan justamente en unir la experiencia profesional y personal, la teoría bien fundamentada y los ejercicios prácticos entretenidos. Nos apetece devolver la diversión al aprendizaje y la pasión al trabajo. Es lo que intentamos hacer.
Personalmente veo la Moda como una forma de expresión muy interesante; la indumentaria está íntimamente enlazada con la sociedad, en constante transformación y es muy reactiva a la intervención creativa personal.
¿Sabes quién era Antonio Variações? ¿Sabes que esta ilustración me recuerda mucho a él?
No le conocía pero me parece genial. Siento un genuino aprecio por la gente peculiar, creativa y libre. Esa ilustración, concretamente, fue creada para registrar el paso a paso del proceso en la ilustración editorial. En ella incluí productos de anunciantes, me inspiré en Iris Apfel, y creé una portada de estas clásicas de revista, con tips y consejos para acordarse del proceso.
Me gusta la moda, concretamente la creación de estampados y la ilustración. Me gusta retratar esa moda personal, modificada por el gusto personal, y transformada en algo único, en el retrato de una personalidad.
Además, siempre he tenido la suerte y el placer de colaborar con diseñadores que me han propuesto cosas guays; el resultado es un montón de prendas de las que estoy orgulloso, y que también tengo en mi armario.
Me gusta este momento de la moda actual, que valora y se inspira en esos individuos de estilismos exagerados y creativos.
Personalmente, los investigo de cerca y ojalá sea un señor mayor «a lo Iris Apfel».
Mirando tu portafolio, diría que tus trabajos han tenido una evolución. Hace tres años eran más barrocos, más oscuros (casi casi agresivos), y ahora observo una parte mucho más delicada y onírica, diría que son más luminosos. ¿Es madurez personal, una evolución del estilo o simple casualidad?
Creo que es un poco de todo, aunque no creo en la casualidad: digamos que fue una confluencia de momento, lugar y condición.
Estuve en una conferencia budista hace algunos años y me tocó mucho a nivel personal. Me apetecía pintar cosas más alegres, aunque la carga conceptual siguiera siendo densa.
Contextualizando, soy brasileño y homosexual, vengo de un país de colores, muy vivo, pero con muchos problemas sociales. Me tocan personalmente los derechos de igualdad social. Me pesa mucho la violencia de genero y la orientación sexual. Estuve viajando y viviendo en muchos sitios,y eso también me ha proporcionado una perspectiva en cuanto a mi cultura, y las que he tenido la suerte de conocer.
Veo las primeras obras como el principio de un proceso de destilación de todo eso; las ideas ahora son menos brutas, pero conservan su valor real.
Me gusta lo diferente, y la arte del retrato se basa justamente en buscar la belleza, también en algo o alguien donde no se suele encontrar. También es un trabajo de deshacer mitos. Me explico, en una sociedad que repudia la vejez, de imágenes instantáneas y desechables, pintar un retrato es aventurarse en un universo ajeno y descubrirlo.
Actualmente, me he propuesto hacer un libro personal, y con él, viajar dentro de mi mismo por las emociones felices y sus complejidades. Es una compilación de recuerdos de mi niñez, mezclados con mi momento actual.
También siento un deseo muy grande de retratar un mayor espectro de lo diferente, y con eso quiero decir todo y cualquier persona.
Antes creo que buscaba lo animal, lo visceral. Ahora me apetece encontrar lo etéreo, la imagen construida, civilizada, retratar lo bonito.
Hoy, como en muchos momentos, está bien hacer el esfuerzo opuesto al de antes, y permanecer positivo.
¿Cuál es tu siguiente paso? ¿Por qué quieres dejar una ciudad tan cómoda y abarcable como Sevilla por esta locura que es Madrid?
Solo te puedo decir que es el momento. También quiero estar mejor conectado con mi familia en Brasil. Mis padres empiezan a estar mayores de verdad, mi sobrino esta creciendo y quiero estar más presente. También, para mí, que viví grande parte de mi vida en la caótica São Paulo, Madrid me resulta genial. Tiene lo mejor de una metrópolis y muy poco de los problemas que encontraba en São Paulo.
Me gusta el cambio y pienso mucho en el momento profesional en que estoy. No voy solo, lo que ayuda muchísimo. Es una sensación de aventura.
Estar cerca del Museo del Prado y del Reina Sofía no está nada mal. Además de las galerías, centros culturales, y demás.
Tengo pasión por Sevilla. Fue mi primera casa en España y me sentí verdaderamente acogido. El paseo del rio, donde hago deporte, y las tardes de sol en la Alameda de Hércules.
Pero nunca he vivido en Madrid y me apetece la aventura; y tengo que decir, tengo amigos maravillosos en la ciudad y estoy contento de volver a estar cerca.
La idea de un brasileño hablando sevillano en Madrid parece resultarle gracioso a todo el mundo, y a mi también.
¿Dónde puede adquirirse tu obra?
Mi obra esta disponible a través de mi sitio web (behance.net/fepefolio) o cargocollective.com/cocoonartproject .