Érase una vez que se era… una chica llamada Barei, tenía 32 años y fue candidata a representar a España por Eurovision en el año 2016. Como si fuera una historia de hadas, consiguió ser la ganadora de una preselección donde Loreen debía estar preguntándose «¿Qué hago yo aquí?».
Reconoceré que yo no he sido pro Barei desde el primer momento, al revés. Leí una entrevista donde hablaba que estaba harta de concursitos entre cantantes para poder lograr un propósito. Pensé en el Melodifestivalen sueco y lo que les gustaba en aquel país. No ayudaría enterarme después que viene de una familia bien situada. Lo llamaremos prejuicio en toda regla.
Hasta ahí. Después vi como hablaba, la promoción que estaba haciendo, la energía que transmitía y entendí el significado de Say Yay!. En realidad me había equivocado: Por tener una familia de bien no significa nada, podía haberse lanzado antes a la fama si hubiera querido y si yo fuera de una familia bien posicionada aprovecharía todos los recursos que tuviera. Sobre los concursitos, una frase sacada de contexto nos puede hacer a todos mucho daño, y si no pensar en vuestras conversaciones del día a día
Llegó el videoclip que, aunque criticado porque ella no salía como protagonista, me parece que reflejaba muy bien el concepto de levantarse y luchar, además de la diversidad cultural y la importancia de la música en nuestro día a día. Más promoción y una actuación en Ucrania (ironías de la vida) que consiguió lo que no hizo la televisión española: transmitir.
Se acercaba la gran fecha: Eurovision. Cambios de estructura, vestuario, luces y la locura que debe ser una organización como la del festival. Quizás la realización no fue la más adecuada y le faltaron más cambios de planos, rapidez y coreos, pero consiguió que toda la gente que estaba en el Estadio lo diera todo. Sólo había que escuchar los gritos de la masa.
Muchas voces criticaban que porque estaba en España la canción no nos identificaba por ser cantada en inglés. Pues bien, en una bonita comparativa de las últimas participantes españolas parece que es una de las más nuestras por los cuatro costados, ¿no?
Quedamos en el puesto 22. Ella salió al terminar el programa a pedir perdón ¿Habéis visto algún artista pidiendo perdón por la posición? Normalmente son consolados por las cadenas de sus países y ella salió a decir que lo sentía. No tendría porque hacerlo y lo hizo. Aún así muchos medios ya habían metido cizaña en los días previos con titulares como «5 motivos por los que no ganaremos Eurovision» y artículos posteriores sobre «Ya hemos olvidado quien es Barei».
Craso error, la que olvidaremos será la ucraniana más allá del mensaje político que transmitió, porque el Say Yay! tiene una vida que parece más larga que otras canciones. Pegadiza, fresca, veraniega y buen rollera. Barei, molas, mucho.
Yo tampoco era por Barei pero después de verla actuar he de decir que me quito el sombrero ante ella. Además luego me he puesto ha investigarla un poco y si la cosas sigue por el mismo camino veo un futuro diferente para la música en España. Un futuro donde se deje de hacer más de lo mismo de una vez.