INÉS DICE…
Si es cierto, como creían los mayas, que el mundo se termina en el 2012, tenemos la suerte de estar disfrutando del último mes del último año completo de la vida en el planeta Tierra. De esta leyenda se hacen eco varias personalidades, comenzando por comunicadores de la conspiranoia como el simpático Íker Jiménez, o cineastas oportunistas como Robert Emmerich. Incluso el fin del mundo encontró su lugar en la obra cinematográfica del cineasta danés más neurótico: Lars von Trier.